Un pionero ético
Este año hemos reconocido y celebrado la consolidación lograda por Coomeva desde hace 25 años, en el desarrollo del pilar del control ético, como parte integrante del control social, ejercido por los asociados. Es de destacar que este compromiso ético de evaluar y confrontar la conducta de administradores y administrados en la Cooperativa, no forma parte del eje principal de la doctrina con la cual se ha consolidado el movimiento cooperativo a nivel mundial, y Coomeva ha sido pionera en esta materia.
Al estudiar sobre los orígenes del Comité de Ética en Coomeva nos hemos encontrado también con un pionero, que con su conducta y proceder cautivó para que la Asamblea de Delegados, en su momento, hubiera adoptado un primer Código de Ética y posteriormente hubiera establecido en los Estatutos la integración y puesta en funcionalidad de esta instancia de decisión con facultad y autonomía. Hago referencia al doctor Rodrigo Escobar Navia, destacado intelectual colombiano, abogado, economista, quien fue gobernador del Departamento del Valle del Cauca, alcalde de Cali, ministro de Educación Nacional, ministro de Gobierno, entre otras altas dignidades públicas, académicas y en el sector privado.
El doctor Escobar, de grata recordación para la comunidad vallecaucana, a finales de los años 90 y en la cúspide de su vida académica y publica, ejerció su función de asociado y delegado en Coomeva. Expuso, en forma visionaria, la urgente necesidad de establecer criterios que delimitasen la conducta ética en una organización que dejaba de ser circunscrita a una región del país y se avizoraba su extensión a ámbitos nacionales, y por lo mismo su vertiginoso crecimiento en asociados y en solidez económica.
Al motivar el inicio de esta corriente de la ética en Coomeva, el doctor Escobar exponía entre otras ideas, que el país se abocaba a “…una crisis de crecimiento, de modernización y desarrollo, en la cual se van quedando atrás muchas de las cosas válidas de antaño”; y afirmó: “… lo que sirvió en un momento no sirve en el momento que lo sigue, esa es la historia. Se van agotando en el camino muchas ilusiones, muchas políticas y muchas estrategias”.
En esta valoración de las realizaciones y ejecutorias del Comité de Ética de Coomeva, hacemos este pequeño homenaje a quien instó para que la conducta ética formara parte del ADN de una organización de la cual nos sentimos orgullosos.
No pueden sentirse ni percibirse como buenas ciudadanas, las organizaciones solidarias que se limiten a trabajar por el bien de sus asociados cumpliendo sus estatutos y las normas generales de la sociedad, como si no vivieran y actuaran en una nación por construir. Los que nos sentimos cooperadores tenemos el deber de ser paradigmas de un comportamiento ético insoslayable, así las debilidades propias de los seres humanos continúen asechándonos desde todos los rincones".
Rodrigo Escobar Navia.
Fecha de publicación 12/12/2023
Última modificación 15/12/2023