La nueva gerencia de hoy necesita líderes de nivel 5

Por Alfredo Arana Velasco
Presidente Ejecutivo
Grupo Empresarial 
Cooperativo Coomeva
 

La gerencia de hoy demanda líderes conscientes de sí mismos y de los demás; capaces de motivar, movilizar, gerenciar e inspirar a sus equipos, conectando con las personas a nivel emocional. Para ello, sus mayores fortalezas deben radicar en el “ser” y no solo en el “saber” o en el “hacer”.  

Gerenciar con liderazgo en una época de cambios tan avasalladores como la actual puede ser tal vez uno de los mayores desafíos. Liderar implica tener las capacidades de un gerente, visión clara, ejecución y retroalimentación permanente; pero para alcanzar el liderazgo claramente hace falta la capacidad de generar confianza e inspirar a otros a dar su máximo potencial. 

El liderazgo además requiere de un aprendizaje constante, de una gran flexibilidad y capacidad de adaptación a circunstancias permanentemente cambiantes, además de desarrollar lo que se ha denominado Inteligencia Emocional, que le permite al líder conectar con iguales, con superiores y con personas de menor rango jerárquico en la organización, para el logro de objetivos que cada vez son más colectivos que individuales y que demandan un ejercicio más intenso de cooperación y colaboración.  

La idea de que buenos gerentes son buenos líderes es un error común, tanto como creer que una posición de alto rango o tener un gran conocimiento de un área específica hace a una persona un líder. Como lo dijo John Maxwell, la verdadera medida de un líder es su capacidad de influenciar a los demás. Los líderes influyen en las personas, mientras que los gerentes manejan operaciones con excelencia¹.

En suma, los nuevos niveles de exigencia en la gerencia de hoy demandan líderes capaces de motivar, movilizar, gerenciar e inspirar a sus equipos para el logro de los objetivos y la consolidación de la estrategia, conectando con las personas a nivel emocional. 

Para ello, hoy entendemos que un buen líder debe tener “saber”, ser un gran ejecutor y poder “hacer”, pero cada vez es más evidente y palpable la necesidad de que desarrolle las competencias del “ser”. 

Es imposible reconocer tantos cambios en la forma en que se hacen hoy las cosas en las empresas, sin reconocer también que esto demanda un nuevo modelo de liderazgo. Por eso en Coomeva hemos venido gestando un modelo propio que promovemos entre nuestros líderes de la Administración y de la Dirigencia, bajo el concepto de la “nueva gerencia”.  

Líderes con conciencia

Gerenciar hoy con liderazgo implica, por tanto, en palabras del médico y conferencista español, Mario Alonso Puig, una llamada para conocernos mejor, gestionar nuestras emociones y establecer lazos con otras personas.

El doctor Puig señala que para poder influir, un líder debe ser competente, tener una visión inspiradora, tener carácter -confiabilidad y coherencia- y generar química -capacidad de conectarse con otro ser humano-². Por tanto, debemos trabajar en desarrollar líderes conscientes de sí mismos y de los demás.

Igualmente en la literatura gerencial se destacan los postulados del profesor estadounidense Jim Collins, en Empresas que Sobresalen, y su planteamiento de líderes de nivel 5 o líder ejecutivo³. Para Collins, los líderes de nivel 5 se caracterizan por dos elementos fundamentales: Una genuina humildad y una potente voluntad profesional. Son capaces de anular su ego por una visión superior de empresa y cuentan con una modestia convincente e incluyente; por eso de ellos no se oyen frases como “Yo hice, yo diseñé, yo pensé”.

Este tema también ha sido abordado de manera magistral por el profesor argentino Fred Kofman⁴, en su modelo de Liderazgo Consciente, en el cual también resalta la importancia del líder inspirador, anclado a valores de responsabilidad, integridad y humildad, y en especial en dos nuevos elementos que emergen en su propuesta: El ser y la conciencia⁵. 

El modelo de Kofman enfatiza en que el líder tiene que ser consciente de las necesidades, expectativas, carencias y emociones de las personas a las que lidera, y también de las suyas propias como persona. Kofman dice: “Vivir conscientemente significa estar abiertos para percibir el mundo a nuestro alrededor, para entender nuestras circunstancias y decidir cómo responder a ellas honrando nuestras necesidades, valores y metas”

En suma, entre las cualidades que definen a un líder consciente están el servicio a los demás, la confianza en las personas y especialmente la confiabilidad que genera en ellas, la búsqueda de la conexión emocional, la aplicación de valores universales, el dar reconocimiento, compartir el éxito y no controlar a las personas, sino desarrollarlas. 

La comunicación es otro pilar poderoso del Liderazgo Consciente, pues permite trabajar la confianza, el compromiso de uno mismo y de los equipo.  

Hacia una “nueva Coomeva”

En estos días en Coomeva estamos convencidos de que además de las competencias del “saber” y el “hacer”, es fundamental reconocer y entender que es imperativo las competencias del “ser” para un buen ejercicio de liderazgo, líderes y equipos con una mayor conexión y sensibilización, con un mayor entendimiento de sus motivaciones y emociones y con la capacidad de reconocer las de los otros miembros del equipo. 

Nos dirigimos hacia el logro de un “nuevo líder Coomeva”, que implica una gerencia moderna orientada a capacidades técnicas para lograr resultados y la ética para direccionar su gestión; un líder enfocado en el desarrollo del ser y sus atributos, como eje fundamental para la consecución de un liderazgo confiable, visionario, que inspira y motiva; y con sentido de equipo logrando confianza, comunicación asertiva, identidad cooperativa y el logro de metas comunes.

Nuestro propósito es dar paso a una organización con un nuevo modelo de liderazgo consciente, colectivo y con las mejores prácticas de gerencia, basados en una cultura de resultados, innovadora, que facilite mayor cercanía con nuestros asociados, clientes y usuarios. 

Nota: Este artículo es basado principalmente en el texto El nuevo líder Coomeva.